ACNUR: La ‘ONG’ de las Naciones Unidas
Peluqueros Con Ucrania está llegando a su fin, pero todavía quedan algunos días para seguir empujando y contribuir a paliar los efectos de la gran emergencia humanitaria que sigue azotando a nuestra vecina, Ucrania. Por eso, creemos que es muy importante dar visibilidad a la labor de la entidad con la que colaboramos en este proyecto, ACNUR. Se trata de uno de los organismos de ayuda a los refugiados más prestigiosos del mundo, nacida en el seno de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La II Guerra Mundial, el conflicto que lo cambió todo
Es innegable que la II Guerra Mundial, la gran guerra, fue el conflicto que cambió el paradigma de las guerras para siempre. Millones de muertos en todos los bandos y una escalada armamentística sin precedentes en la historia que desembocó en la bomba atómica cambiaron las reglas de las relaciones internacionales para siempre.
Fue, precisamente, esta guerra la que impulsó la creación de la mayor organización internacional de todos los tiempos, La ONU, que nació en julio de 1945, para garantizar las relaciones entre los países aliados y supervisar el cumplimiento del derecho internacional.
Fruto de esta unión nacería uno de los mayores hitos de esta organización y de la humanidad, La Declaración Universal de los Derechos Humanos, la carta que establece los derechos básicos que preservan la dignidad del ser humano, como especie. Y de uno de los derechos que contempla la declaración, el derecho al asilo y refugio, se gestó el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
«He hablado con mujeres, con niños, que se han visto gravemente afectados por esta guerra. Obligadas a huir de niveles brutales de violencia, han dejado atrás susbhogares y a menudo sus familias, generándoles una enorme conmoción y trauma. Las necesidades de protección y humanitarias son enormes y siguen aumentando. Y aunque sea muy urgente, la ayuda humanitaria por sí sola no puede darles lo que realmente necesitan, que es la paz».
Filippo Grandi, Alto Comisionado de la ONU para los refugiados
Y es que el nacimiento de ACNUR, al igual que el de la ONU y el de la Declaración de los Derechos Humanos, fue consecuencia directa de los efectos de la II Guerra Mundial. Ya que, casi 5 años después del final del conflicto, sobre 1950, todavía quedaban más de 1 millon de refugiados que todavía se encontraban sin hogar. La misión de este nuevo organismo fue clara desde su primer día: “proteger a los refugiados y desplazados por persecuciones o conflictos, y promover soluciones duraderas a su situación, mediante el reasentamiento voluntario en su país de origen o en el de acogida”.
La prioridad en una guerra: atender a los refugiados
Desde su fundación, ACNUR ha atendido a más de 111 millones de refugiados en todo el mundo, una labor por la que ha sido reconocida en dos ocasiones con el Premio Nobel de la Paz (1954 y 1981) y con el premio Príncipe de Asturias a la Cooperación Internacional (1991).
Como no podía ser de otra manera, esta entidad ha estado colaborando desde que se desatara la invasión rusa en Ucrania desde finales de febrero. Y es que, según los datos de ACNUR, este conflicto ha generado ”la crisis de refugiados más importante en Europa desde la II Guerra Mundial”.
Fuentes de la organización nos han compartido sus datos y son escalofriantes. Un total de 12 millones de personas han tenido que ser desplazadas de su hogar (una cuarta parte de su población) mientras que cerca de la mitad (6 millones) han cruzado la frontera de su país huyendo del conflicto.
Aunque el peor dato, como nos explican los cooperantes es que “más del 90 % de refugiados son mujeres y niños que han esperado horas para cruzar las fronteras con temperaturas bajo cero y con grandes nevadas. Muchas familias se están despidiendo de sus maridos y sus hijos mayores de 18 años en la frontera. La ley marcial obliga a los hombres entre 18 y 60 años a quedarse en el país”.
Esta emergencia humanitaria, sin precedentes desde 1945, ha llevado a ACNUR a organizar uno de los dispositivos de ayuda más importantes de su historia, con presencia en el mismo país y en otras cinco naciones fronterizas en las que el flujo de refugiados es mayor (Polonia, Eslovaquia, Hungría, Rumanía y Moldavia).
Actividad dentro de uno de los puntos azules de ACNUR.
El trabajo de ACNUR en números
Para poder visualizar la magnitud del trabajo de ACNUR durante este conflicto basta con repasar los números de su labor. Según los datos que han compartido con nosotros:
- Decenas de puntos azules instalados alrededor de las fronteras para dar asistencia y protección a las personas en mayor situación de vulnerabilidad, como niños y personas con necesidades específicas.
- Programas de ayudas económicas para ayudar a refugiados y familias de los que ya se han beneficiado más de 150.000 personas.
- Gestión y envío de materiales de primera necesidad (mantas térmicas, lonas de plástico, toallas, ropa de abrigo, lámparas solares, kits de cocina, sacos de dormir, almohadas, colchones, entre otros) para cubrir las necesidades de más de medio millón de personas desplazadas.
- Cerca de 90.000 casos de asistencia legal y psicológica.
Estos datos son los más actualizados que están disponibles, por lo que “los números son mucho mayores a día de hoy ya que es muy complicado contabilizarlo todo, y más, en una situación de conflicto como la que estamos viviendo” nos aseguran desde ACNUR.
Esta misma organización estima que sólo en Ucrania se necesitan más de 1200 millones de euros para atender las necesidades de los refugiados como el refugio, la comida y el agua, la atención psicológica, la ropa de abrigo. Además de garantizar una protección especial para las mujeres y los niños que son los más propensos a sufrir violencia, abuso y explotación sexual durante este tipo de conflictos. A todo esto “hay que sumar otros 1800 millones de euros más para reforzar las fronteras y la capacidad de atención de los países vecinos” sentencian desde ACNUR.
Es por todo esto que tanto ACNUR como otras ONG internacionales siguen necesitando la colaboración de toda la sociedad a día de hoy. Puede que los medios de comunicación hayan relegado este conflicto de sus titulares, pero somos las personas las que no debemos olvidar que la emergencia sigue en marcha y que hay gente que lucha todos los días por crear un mundo mejor, justo, como todos los cooperantes de ACNUR ¿ME AYUDAS?